Introducción:A comienzos del siglo XIX, las tensiones políticas en los territorios españoles de América eran explosivas. Era evidente la rivalidad entre los criollos y los peninsulares que representaban a la Corona en América (llamados despectivamente"chapetones" o "gachupines"). Las desigualdades e injusticias de las sociedades americanas también exacerbaron las tensiones sociales. En consecuencia, el triunfo de la Revolución Francesa y el nuevo gobierno de Napoleón Bonaparte detonaron, sin quererlo y por caminos divergentes, los procesos de independencia en Haití, Brasil y el continente hispanoamericano.
Las guerras por la independencia de España duraron casi quince años en Sudamérica, dirigidas desde el norte por el venezolano Simón Bolívar, y desde el sur por el argentino José de San Martín, por eso llamados los "Libertadores".
José Francisco de San Martín (Yapeyú, Argentina, 25 de febrero de 1778 - Boulogne-sur-Mer, Francia, 17 de agosto de 1850) fue un un militar argentino cuyas campañas fueron decisivas para las independencias de la Argentina, Chile y el Perú.
A los siete años viajó a España y con el tiempo se unió a los ejércitos españoles que combatían la dominación napoleónica de la Península, participando en las batallas de Bailén y Albuera. En 1812, tras una escala en Londres, partió a Buenos Aires, en donde se le encomendó la creación del Regimiento de Granaderos a Caballo (que hoy lleva su nombre), que resistió un ataque realista durante el Combate de San Lorenzo. Luego reforzó el Ejército del Norte.
Desde la ciudad de Mendoza inició su plan para la liberación definitiva de Sudamérica: tras crear al Ejército de los Andes cruzó con el mismo la cordillera de los Andes y liberó Chile, en las batallas de Maipú y Chacabuco. Tomando bajo su control los barcos chilenos, atacó el centro del poder español en sudamérica, la ciudad de Lima, que declaró su independencia en 1821. Se encontró en Guayaquil con Simón Bolívar, y tras dicha entrevista le cedió su ejército y la meta de finalizar la liberación del Perú. San Martín partió a Europa, y murió el 17 de agosto de 1850.